Ana Beatriz Muñoz Valdivieso
A pocos días de la celebración de más de dos mil años del nacimiento del niño Jesús en Belem, los fieles católicos están haciendo los preparativos para celebrar tan importante acontecimiento. Esto es motivo de reuniones familiares, así mismo de fortalecer lazos entre la familia y amigos, lo mismo que limar asperezas surgidas durante el año.
Aunque cada día de nuestra existencia debe ser motivo de júbilo, estas fechas hacen de nuestra existencia que sean únicas e irrepetibles. Saber que todavía podemos adquirir un sorbo de vida es motivo especial para ser dichosos. Algunos familiares y amigos se podrán reunir, tal vez con otros no, sin embargo los ausentes saben que forman parte importante de nuestra vida.
Quienes se nos adelantaron sólo nos queda recordarlos con mucho cariño porque formaron parte importante en nuestro existir. En nuestra región celebramos estas fiestas de distintas formas. Primeramente desde temprano en distintos hogares se buscan los padrinos quienes se encargarán de acostar al niño Dios, serán quienes se encarguen de repartir los dulces a todos los invitados.
Posteriormente la cena se servirá más tarde dependiendo de la hora que la familia desee. En la mesa familiar lo más tradicional es el pollo horneado con su respectivo spaghetti o lo tradicional de la region el puré de papas horneadas. Para el postre natillas o duraznos en almíbar con media crema. Después de la cena viene la convivencia, para después de la media noche, ir casa por casa de los familiares a darles el abrazo navideño. Esta es una forma en que los istmeños celebran estas fiestas navideñas, donde todo es alegría y júbilo.
Quienes integramos este portal que con tanto cariño lo realizamos para ustedes, les deseamos de corazón una muy feliz navidad en compañía de sus seres queridos.!!!!feliz navidad!!!!!
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