Gerardo Valdivieso Parada
Juchitán, Oax.- En las aulas no hay alumnos problemáticos sino niños con diferentes niveles de aprovechamiento en la escuela, ya sea que tenga obstáculos en su asimilación del saber o al contrario sean mas aprehensivos que los demás, todos tienen derecho a una educación que los acepte:
“Las personas al igual que las aves son diferentes en su vuelo, pero iguales en su derecho de volar” así se resume la propuesta de intervención de los maestros de la Unidad de Servicio Apoyo a la Educación Regular número 63 que presentaron su proyecto escolar.
Como cada años los integrantes de la USAER número 63 presenta su programa de actividades para sus alumnos “extraordinarios”, como los llamó su directora Zoraida López Trinidad.
Los 10 integrantes de esta Unidad elaboraron las estrategias didácticas para favorecer la comprensión lectora en los niños de primaria que presentan barreras en el aprendizaje y participación social, involucrando los saberes comunitarios y la ecología.
Con la presencia supervisores y directores de varias escuelas los maestros expusieron los obstáculos que se presentan cuando un niño es identificado como un alumno extraordinario, como es la falta de aceptación de los padres de la condición de su hijo, y la falta de interés y compromiso de los padres y maestros.
Se agrega el hecho que los maestros de esta unidad tienen que cubrir otras actividades a falta de personal como el servicio social y el secretariado, así que tiene que realizar las visitas domiciliarias y el papeleo por su cuenta.
Actualmente la USAER atiende a cuatro escuelas primarias entre las se encuentran la Centro escolar Juchitán, Daniel C. Pineda que tiene una gran población estudiantil.
La ubicación y las estrategias para atender a niños extraordinarios son necesarias para evitar las deserciones pues el alumnos que tiene obstáculos en su aprendizaje si no se les atiende lo va arrastrando hasta que un día piensa que la escuela “no es lo suyo” y la abandona.
Cuando el niño presenta alguna discapacidad u obstáculo, ya sea visual, motriz, su rapidez o lentitud en leer o escribir y no es localizado y se le obliga a llevar el ritmo normal de los demás lleva como primera consecuencia que el alumno busque pretextos para no ir a la escuela.
La falta de atención de los niños que presentan rezagos que presentan los rasgos descritos también llevan a que los niños sean discriminados por sus compañeros y el maestro.
Los maestros presentaron casos en donde ha habido alumnos de primaria que presentaban discapacidad intelectual pero con intervención de los maestros de esta unidad han llegado a secundaria y bachillerato llevando el acompañamiento de los maestros, uno de los orgullos de esta unidad.
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