Gerardo Valdivieso Parada
Cd. Ixtepec, Oax.- Los directivos de la Universidad del Istmo minimizaron el acoso sexual de sus profesores a las alumnas de este campus al considerar que “son ciudadanos mayores de edad” y en cambio deplora la defensa y acompañamiento de la denuncia de las víctimas de tres de sus maestros al considerar “que responde a intereses personales menos respetables”.
En un documento que enviaron a los medios, la Universidad del Istmo de entrada reconoció “que ha habido conducta impropia por parte de dos profesores, que han dado lugar a una queja de las alumnas involucradas”.
Para después justificar la conducta de los profesores denunciados por acoso sexual, como si entre profesores y alumnos no mediara estatus de autoridad, tanto que ante la denuncia de las alumnas hicieron caso omiso como autoridades y prefirieron protegerlos hasta que hubo una denuncia pública:
“Es preciso recordar que los profesores y los alumnos son ciudadanos mayores de edad, que tienen derecho a establecer y mantener las relaciones que libremente decidan, aunque dentro de la universidad se pide a los profesores que guarden la debida distancia”.
La Unistmo se lava las manos ante conductas indebidas de sus profesores contra su alumnado y reduce una falta que hoy ha llevado a un proceso judicial a uno de sus profesores a un incidente de moral religioso: “las autoridades universitarias no pueden interferir, dado que no pueden usurpar funciones de policía o de jueces, y tampoco es su función ni su vocación aplicar ningún tipo de moral religiosa”.
En cuanto al profesor que está ligado a proceso judicial y que le otorgaron horarios de clase informaron que “en respeto estricto a la Constitución debemos otorgarle la presunción de inocencia. Se le pidió que presentara la renuncia voluntaria a la universidad, pero, como era su derecho, se negó a ello.”
Los otros profesores denunciados se develó en el comunicado que siguen dando sus clases normales, aunque se tomaron la previsión de que las alumnas denunciantes no coincidieran con sus materias, la institución aseguró que siguen en curso los procedimientos administrativos en su contra.
A pesar de reconocer las fallas de sus maestros por “conducta impropia” la Unistmo persiste en considerarla una campaña de una profesora, tratando de desviar el tema grave de acoso sexual en la Universidad por un caso de supuesta baja calidad académica denunciada por un grupo de alumnos denunciaron hace meses.
Han salido a la defensa de la Unistmo y de sus directivos, hasta 60 alumnos que han firmado desplegado y un alumno que en sus redes sociales denuncia maltrato por su preferencia sexual, acusando a las maestras defensoras de ser seudoprofesoras y al maestro que se unió a la defensa de alumnas víctimas y sus compañeras de trabajo de acosador sexual.
Los alumnos piden la destitución de las maestras por dañar la imagen de la institución al declarar mentiras a los medios como el uso de porros para agredirlas e incluso exigen disculpas a los medios de comunicación al considerar, coincidentemente con los directivos de la Unistmo, que se trata de un campaña orquestada.
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