Región

La mitad del dinero para pavimentación de calles se va en moches a autoridades y sindicatos

– Como resultado las calles son casi intransitables en zonas hundidas y fracturadas
Gerardo Valdivieso Parada
Juchitán, Oax.- La corrupción en la pavimentación de calles en este municipio viene de varias administraciones pasadas, no siendo esta la excepción, que se verifica en el pésimo estado de las calles de la ciudad que se encuentran fracturadas, hundidas, encharcadas, en partes los vehículos tiene que parar para pasar un hundimiento o evitar pasar por la pavimentación cortada y hundida.
Aún así la inauguración de pavimentación de calles, principalmente en las nuevas colonias es una constante, como para justificar que la autoridad está invirtiendo en obra pública cuando está tirando los recursos por el caño de la corrupción.
La corrupción galopante en este sector lleva a saltarse muchas especificaciones técnicas y lleva acciones tan burdas como pasa en las agencias:
“Lo que hicieron no se puede llamar pavimentación de la calle, prácticamente vinieron a aventar cemento” opinó Alejandro López López integrante de la Asamblea General del Pueblo de Álvaro Obregón sobre la pavimentación de las calles realizada por el Ayuntamiento en esta agencia.
Un constructor local, que no dio su nombre para evitar represalias, consideró que el 50% de la inversión para la pavimentación de las calles se va en mochadas a las autoridades y cuotas a los sindicatos además de descontar su porcentaje de ganancia. Por lo que los constructores se las arreglan con la mitad del recurso omitiendo procesos importantes en la pavimentación.
Reveló que del millón de pesos por 100 metros lineales de pavimento hidráulico, entre un 20 y 30 por ciento se va en gratificaciones a las autoridades y funcionarios que supervisan las obras, a esto se agrega el pago a los líderes de los sindicatos de la construcción para permitir que la obra se realice sin contratiempos.
Dijo que con el dinero recortado a la mitad el constructor omite procesos importantes de la obra de pavimentación empezando por lo que no se ve:
“Todo lo que debe llevar abajo de la loza de concreto en un proceso constructivo óptimo deja mucho que desear, ya que no se ejecuta en la mayoría de las ocasiones, no hay un mejoramiento del terreno, una compactación adecuada que es primordial”.
Detalló que los materiales que van debajo del superficie de rodamiento no son materiales de bancos no autirizados, sin pruebas de laboratorio, una mala compactación que lleva, con el tiempo luego de la compactación por el, a depresiones o hundimientos y pendientes inadecuadas que lleva a fracturar el concreto, a la entrada de la humedad y encharcamientos.
Los constructores omiten los procesos porque no hay una supervisión de la norma porque está implícito “las mordidas, los cochupos, propinas, comisión, arreglos en los oscuro, porcentajes, ya no digamos un diez ahora alcanzan el 20 el 30 por ciento y entonces los constructores lo llevan por la libre haciéndola como pueden o como quieren, con los materiales, espesor que quieren, y así entregan esas pavimentaciones”.
Dijo que en el caso de Juchitán hay una total omisión de las autoridades respecto a las obras en la ciudad: “cuando uno va a Salina Cruz o Tehuantepec la cosa cambia, se te acerca la dirección de obras públicas, te pide tu licencia de obra, tus planos, los coteja, verifica que lo que estás construyendo es lo que le estás entregando a la autoridad, hay un seguimiento, aquí no, todo mundo hace lo que quiere”.
Observó que ya no se respeta el proceso de sellar el pavimento entre las juntas de los cuadros de cemento para evitar la humedad que al estar dañada por el agua pierde su dureza:
“Entre loza y loza, en la junta, ahí se debe sellar con un elemento que debe ser un material acrílico, alguna resina, para que no entre el agua y no se hace; no se da un mantenimiento cuando el tapajuntas se deshace, no hay un seguimiento, porque ya no existe la ética entre los constructores y las autoridades por hacer las cosas bien”.
De su lado el ingeniero civil Domingo Castillo, consultado sobre el tema asegura que las obras en la ciudad no se hacen de manera correcta “no se hace el compactado a cada capa de 20 cm, compactado con control de calidad, con un ensayo de compactación Proctor, es decir se debe comprobar el grado de compactación, la humedad óptima para garantizar una obra adecuada”.
“(El ayuntamiento y la constructora) justifican el costo de un pavimento de acuerdo a las especificaciones generales pero no lo hacen así, supuestamente justifican el costo de una base antes de pavimentar con una mezcla de materiales pétreos: cementante con grava, una base considerable, bien compactado y después viene la carpeta hidráulica. Nunca lo hacen. Es más antes de eso deben pavimentar el terreno natural”.
El ingeniero detalla la serie de omisiones en las obras de pavimentación “están manejando un procedimiento de construcción de pavimento de manera directa con trompos que trae aproximadamente 8 metros cúbicos, muchas veces ni siquiera guía ponen llega el trompo y pum pum a vaciar, hasta con los niveles están mal, lo nivelan al tanteo.”
Domingo Castillo explica el por qué de las grietas “después de pavimentar viene una máquina para cortarlo hasta 5 cm de espesor para marcar los cuadros pero a una distancia de 25 metros se debe de llevar una punta de expansión, ahí tiene que meter una cimbra tener una separación de una pulgada y rellenar con un material para que permita la dilatación del pavimento, lo que no se hace, los cortes que se hacen es para inducir las grietas en caso de dilatación o por cualquier tipo de fuerza que se ejerciera, esa línea se debe de rellenar para que no se filtre el agua, lo que tampoco realizan”.
Sin un proyecto integral urbano, con la construcción de obras públicas sin considerar las afluentes naturales de la ciudad el peligro de un desastre parecido a las que padecieron las ciudades de Guerrero por las lluvias intensas se puede repetir en Juchitán debido a que:
“La gran parte de las obras de infraestructura se realizan con proyectos improvisados no se realizan los estudios necesarios como los estudios topográficos, hidrológico, la ingeniería del proyecto, un buen proyecto que resuelva los problemas y no los cree” dijo el experto.
Y es que el actual ayuntamiento y los anteriores construyeron sin prevenir los desastres naturales, “se construyen infraestructura sobre zona de escurrimientos, si la autoridad hubiera hecho la configuración topográfica de toda una zona hidrológica, qué pasa cuando es un proyecto improvisado llegan y construyen hacen formación de terraplén sin prever el régimen hidrológico, es uno de los problemas fuertes que ha provocado inundaciones inclusive con aguas fluviales normales en la ciudad”.

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