Gerardo Valdivieso Parada
Juchitán, Oax.- “Nosotros somos la cara del Instituto” dice Julio César Martínez Ordoñez Capacitador Asistente Electoral (CAE) que se encargó de notificar y capacitar a los funcionarios de casilla de la parte norte de la ciudad en la Segunda Sección.
Con la elección de gobernador cuya jornada electoral se llevó a cabo el domingo pasado, el CAE del Instituto Nacional Electoral (INE) acumula nueve procesos electorales, en este proceso tuvo que atender dos secciones electorales: 284 y 288 con un total de seis casillas.
Julio César tiene que andar en silla de ruedas por afectaciones de la polio que tuvo desde niño, su fuerte carga de trabajo inició con la entrega de las cartas notificaciones a los ciudadanos insaculados.
En la primera sección electoral le tocó entregar 140 notificaciones en sus respectivos domicilios, pero la segunda fue un “bonche” de quinientas cartas que tenía que entregar personalmente al ciudadano.
Recorrer las calles preguntando por el domicilio del ciudadano es extenuante, pero Julio César está acostumbrado a los retos y por eso su rutina fue levantarse muy temprano para encontrar a la persona antes de que marche al trabajo y entregarle su notificación y darle una pequeña plática sobre su función en la jornada electoral.
Si el esfuerzo físico es demandante, la tarea de convencer al ciudadano de aceptar el encargo de desempeñarse como funcionario de casilla en prácticamente todo el día de un domingo es más complicado.
Por eso considera que los CAE son los que tienen el contacto directo con la gente, los que tienen que saber explicarle al futuro funcionario de casilla de la importancia de participar en la jornada electoral y sacar adelante la parte más importante del proceso: la jornada electoral al contar los votos, rellenar los expedientes y armar el paquete electoral.
El trabajo del CAE se ve reflejado en el día de la jornada cuando no se presentan incidentes, retrasos, confusiones que lleven a que los representantes de partidos reporten quejas e incluso impugnen una casilla por errores en estas etapas de la jornada, para ello se necesita una buena capacitación por parte del CAE.
El trabajo de los CAE es cada día más difícil y un reto más grande sobre todo por el desprestigio que ciertos partidos pretenden colgarle y los ataques a la institución que no se reduce a dos consejeros electorales sino al gran número de CAE y los ciudadanos que fungen como ciudadanos de casilla.
Aunque en algún proceso anterior se le negó el derecho se trabajar como CAE por su discapacidad, ya que consideraron que llegaría a retrasar el trabajo, ha habido procesos en que Julio César es puesto como ejemplo de trabajo y responsabilidad.
Fue el caso de este proceso cuando desde el INE México se quiso testificar el simulacro realizado por Julio César, para lo cual se apersonó al evento el Director Ejecutivo de Capacitación Electoral y Educación Cívica del INE México Roberto Heycher Cardiel Soto, además Jorge Alejo Victoria, Vocal de Capacitación del INE Oaxaca.
Cuando un proceso culmina el CAE vuelve a sus otros trabajos en el caso de Julio César se desempeña como auxiliar contable y a ayudar a sus hermanos en la elaboración de fuegos artificiales.
Aunque luego de la culminación de cada proceso siempre dice que será la última vez, el cariño a la playera del INE lo llevan a inscribirse nuevamente aunque dijo que ante un nuevo proceso concursaría para ser consejero electoral.
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